Interesante estudio el realizado por el Centro de Estudios sobre Desarrollo Económico – CEDE de la Universidad de los Andes, plantea de manera breve cómo la decisión de ser o no madres es un factor que incide en la calidad de oportunidades de empleo y en el salario de la futura madre.
El artículo publicado en un blog de la Facultad de Economía señala además algo que menciona como «penalidad por maternidad», es decir que la mujer en el contexto colombiano además de ganar menos que los hombres aunque tenga mayor nivel de escolaridad, recibe una especie de «sanción» o castigo, sea que decida tener sus hijos en la década de los veinte cuando está empezando su vida laboral, o después de los 30 y deba hacer una pausa para poder dedicarse a la maternidad y luego regresar de nuevo al mercado.
El artículo en mención cita a Sarzosa quien concluye «que existe un efecto positivo sobre el salario de la madre por cada año adicional de espera por el primer hijo a partir de los 20… De otra parte, si espera demasiado a tener hijos y debe interrumpir su carrera cuando ya está establecida en el mercado laboral, puede incurrir en costos salariales importantes. Por ejemplo, al principio de la carrera el efecto positivo de esperar un año adicional al primer hijo puede llegar a ser hasta de 1,14 puntos porcentuales. Sin embargo, el costo negativo de esperar hasta después de los 30 puede llegar a ser de 4 puntos porcentuales sobre el salario».
Ver artículo completo en:https://economia.uniandes.edu.co/profesores/blog-profesores/882-analisis-los-hijos-y-los-salarios-de-sus-madres/882-analisis-los-hijos-y-los-salarios-de-sus-madres
Desde mi perspectiva femenina, la investigación me invita a pensar que nuestra sociedad y las pocas buenas oportunidades de desarrollo laboral que hay para las mujeres, no nos permiten si quiera tomar decisiones estratégicas para nuestra fecundidad.
En el escenario de la investigación ya resulta difícil para una mujer tomar decisiones sólo teniendo en cuenta las variables edad y número de hijos, qué pasa con otras variables…
Sería interesante que el estudio agregue qué pasa con las mujeres que en los veinte o en los treinta han optado por ser madres y se ven enfrentadas a situaciones de inestabilidad laboral ( desempleo por ejemplo, reestructuración de cargos), qué pasa cuando por alguna circunstancia son cabezas de hogar, qué pasa con aquellas variables que en gran medida no se pueden controlar, porque al final la edad vs el número de hijos es controlable…
Nuestras sociedades no están diseñadas o pensadas desde políticas de género, sino con intereses más de mercado. La oferta y la demanda junto con las buenas oportunidades profesionales no suelen comulgar con el desarrollo profesional, los salarios y la maternidad…
Así que las mujeres, indudablemente, que piensen estratégicamente en la fecundidad vs salario y desarrollo, tienen que decidirse por las siguientes opciones:
A. Ser exitosas profesionales y ganar excelentes salarios pero sin hijos.
B. Ser madres con bajos salarios y un trabajo eterno, sin mucho aporte a su desarrollo, pero seguro y estable.
C. Ser madres con bajos salarios y un esposo influyente y excelente progenitor económicamente y emocionalmente.
D. Ser madres, con excelentes salarios, sin tiempo para sus hijos y un buen desarrollo profesional.
E. Ser madres con excelentes salarios, con un buen progenitor y excelente desarrollo profesional…
Esta última, creo que son esos pocos casos contados con los dedos de las manos…
Qué complejo esto de analizar la relación entre fecundidad, maternidad y salarios….
Cada vez estamos más en el escenario de que ser madre, profesional exitosa y con excelente salario es más un cuento chino que colombiano…
Me gustaría encontrar la fórmula para tomar decisiones estratégicas de fecundidad…